La Ruta comienza poco después de la localidad tevergana de Páramo, a escasos kilómetros del Puerto Ventana, donde se señalizará con un panel. El consistorio habilitará en este punto, al lado de la carretera As-228, un aparcamiento con capacidad «para varios vehículos y un autocar», explicó ayer la alcaldesa, María del Carmen Fernández. En este mismo lugar también se colocará «un panel de interpretación general» de la ruta y sus características.

El recorrido se dividirá en dos tramos. El primero, de unos cuatro kilómetros de longitud y «prácticamente llano, estará orientado a todo tipo de personas». Concluirá en una bifurcación de caminos, en el entorno del monte La Verde y ofrecerá al visitante la «posibilidad de conocer el bosque, la distribución de la vegetación y el valor ecológico de los hayedos» a través de varios paneles explicativos. También se señalizarán otros elementos de interés, entre ellos, «diversos cantaderos de urogallos» conocidos por los vecinos y la Fuente de Las Vallinas, sobre la que hay diversas leyendas. Según los lugareños, «los leprosos viajaban a Teverga a beber del agua de esta fuente para curarse». La «zona de espera del oso», lugar en el que «más de uno se encontró con uno de estos animales hace años» será otro de los sitios reflejado en los carteles.

El segundo tramo del itinerario será una ruta de senderismo y, por tanto, no apta para niños. Tomará el camino que parte de la bifurcación mencionada hacia La Cascada de Xiblo y recorrerá un paraje «rodeado de hayas y robles con tres antiguas cascadas, la menor de más de 30 metros de caída», manifestó la alcaldesa. Se trata de una zona «de gran relevancia faunística, con presencia de rebecos y corzos».